El cáncer de vejiga se manifiesta en el cuerpo humano a través de alteraciones al orinar. Si
una persona siente dolor al orinar, lo hace de forma exageradamente frecuente o tiene sangre
en la orina, debe dirigirse al médico para ser examinada.
No obstante, estos síntomas por sí solos no implican necesariamente que la persona que los
padezca tenga cáncer de vejiga. El urólogo (médico especializado en enfermedades de las vías
urinarias) es el único que puede detectar (diagnosticar) el cáncer de vejiga a través de un
examen físico.
Los carcinomas de células pequeñas de vejiga se derivan de células neuroendocrinas madres.
Estos tumores pueden estar mezclados con elementos de carcinoma de células transicionales en
el mismo tumor. Otra fuente posible de origen del tumor son células dendríticas en el
urotelio normal.
Estos tumores muestran tinciones especiales para enolasaneuro-específica. Son tumores
biológicamente agresivos con invasión vascular y muscular temprana. Todos los pacientes con
carcinoma de células pequeñas deben de ser evaluados para descartar un tumor de células
pequeñas de pulmón o de próstata, los cuales pueden haber metastatizado o haber invadido la
vejiga.
Las células uroteliales revisten la vejiga. El carcinoma urotelial (de células de
transición) es la forma más frecuente de cáncer de la vejiga. Corresponde a más del 90% de
los casos de este tipo de cáncer.
Tumores uroteliales no invasivos:
El cáncer sólo compromete la capa más interna de la vejiga, el urotelio. No se ha propagado
a las capas más profundas de la vejiga.
Los tumores epiteliales del tracto urinario que comprometen la pelvis renal son
relativamente poco comunes.
Los tumores de la pelvis renal representan el 10% de todos los tumores renales y el 5% de
los tumores de urotelio. Los tumores de uréter son aún menos comunes ocurriendo en sólo un
25% de los tumores de pelvis renal. Los tumores de uréter son hombres 3:1 mujeres, y blancos
2:1 negros.
Cistitis es el término médico que se refiere a la inflamación de la vejiga. La mayoría de
las veces, la inflamación está causada por una infección bacteriana, y se llamainfección del
tracto urinario (ITU). Una infección de la vejiga puede ser dolorosa y molesta, y puede
convertirse en un problema de salud grave si se propaga a los riñones.
Con menor frecuencia, la cistitis puede producirse como reacción a ciertos medicamentos, a
la radioterapia o a irritantes potenciales, tales como los aerosoles de higiene femenina,
las jaleas espermicidas o el uso prolongado de un catéter.
La cistitis intersticial es una misteriosa condición de la vejiga, en la cual la vejiga se
irrita o inflama (hincha), lo que causa dolor y micción (orina) dolorosa y frecuente. Los
síntomas de la cistitis intersticial son a menudos similares a los síntomas de la infección
de las vías urinarias. Sin embargo, en la cistitis intersticial no hay infección y los
síntomas no responden al tratamiento con antibióticos.
Sigue siendo un misterio la causa exacta de la cistitis intersticial, aunque los científicos
continúan investigando las causas posibles, como una bacteria indefinida, una alergia o una
reacción del sistema inmune, una sustancia tóxica en la orina o un problema neurológico en
la pared de la vejiga. Existe también evidencia de que la cistitis intersticial podría no
ser solo una enfermedad, sino varias enfermedades que comparten síntomas similares.